Se necesitan 500 temporeros locales para el sector agrario alavés
Se buscan 500 temporeros locales para el sector agrario alavés. La Diputación Foral de Álava está trabajando junto a la UAGA y el Servicio Vasco de Empleo-Lanbide para proveer al sector agrario de más de 500 «trabajadores locales». La limitación de movimientos de la población, a causa del confinamiento, además del cierre de fronteras y la prohibición de desplazamientos de temporeros para la realización de tareas agrícolas hace que la «necesidad de trabajadores» sea «acuciante» en el campo alavés. Así lo reconoció el diputado de Agricultura, Eduardo Aguinaco, que compareció este viernes ante las Juntas Generales para informar sobre la gestión realizada por su departamento ante la pandemia por coronavirus durante el último mes y medio, que destacó también que el sector vitivinícola afronta una crisis «sin precedentes».
Con ello pretenden dar respuesta a la «necesidad de trabajadores temporeros, fundamentalmente para la campaña de poda en verde en Rioja Alavesa», anunció. «Se trata de captar trabajadores locales para evitar desplazamientos, facilitar su traslado y evitar el uso de alojamientos comunitarios». Por ello, el proceso de selección de interesados ya ha comenzado, y a los seleccionados les formarán mediante «videos cortos a través de móvil» e «incluso en árabe», informó el diputado.
La Diputación ha señalado también que se está tramitando una Orden para ampliar el criterio de proximidad fijado por el RD Ley 13/2020 para la contratación de temporeros.
Aguinaco aseguró que la Diputación trabaja de manera «estrecha y constante» con el sector primario para «intentar dar respuesta» a los diferentes problemas que han surgido en el Territorio a partir de la propagación de la enfermedad covid-19 y la declaración del estado de alarma. Aunque reconoció que la agricultura y la ganadería «no se encuentran entre las actividades directamente más afectadas por las medidas excepcionales adoptadas», informó de que «algunos sectores productivos han comenzado ya a padecer perturbaciones e impactos económicos relevantes, consecuencia fundamentalmente de la paralización, cierre o limitaciones en los canales comerciales tradicionales».
En este sentido, destacó la «compleja situación» del sector vitivinícola y sidrero, productores de queso, cordero, cabrito «y algunas producciones hortícolas». Respecto a la situación de los vinos alaveses, ha afirmado que «Rioja Alavesa, el txakoli de Ayala y la sidra de Álava afrontan una crisis sin precedentes en el sector vitivinícola, símbolo y clave económica de Álava».