Se confirma las penas de Griñán y Chaves por el fraude de los ERE
Tres de los cinco magistrados dan validez a la sentencia. Dos juezas defendían absolver a Griñán de malversación, lo hubiera evitado su entrada en la cárcel.
El tribunal se ha dividido al tomar una decisión que da un nuevo golpe al PSEO andaluz, que gobernó durante 36 años ininterrumpidos. La resolución se ha consolidado con una diferencia mínima de los votos del tribual, tres de los cinco jueces la han apoyado: Juan Ramón Berdugo, Carmen Lamela y Eduardo de Porres, considerados de tendencia conservadora. Por su parte, las magistradas Ana Ferrer y Susana Polo, enmarcadas en el sector progresista, para los que no existió en ningún momento malversación de fondos, han anunciado que emitirán un voto particular discrepante al considerar que se debería haber aceptado parte del recurso presentado por Griñán y, tras anular la sentencia de primera instancia, haberle absuelto de ese delito. Un fallo en esa línea le habría evitado entrar en la cárcel.
Han sido 11 años desde de que la jueza Mercedes Alaya iniciara las diligencias del caso de corrupción en Andalucía, «ERE fraudulentos de la Junta» -un sistema fraudulento en la concesión de ayudas sociolaborales- y dos años y ocho meses después de la primera sentencia condenatorio de que la Audiencia de Sevilla, el Tribunal Supremo (TS) acaba de pronunciarse sobre las condenas impuestas a los 19 ex altos cargos del Gobierno andaluz que se sentaron en el banquillo de los acusados.
Además, el tribunal mantiene los restantes pronunciamientos de la sentencia de la Audiencia de Sevilla, de manera que, además de Griñán, otros ocho condenados tendrán que entrar en prisión.
El texto total de la sentencia no se conocerá hasta septiembre, una vez se haya presentado el voto discrepante anunciado por las magistradas Ana Ferrer y Susana Polo