Sánchez se carga otra de las ayudas para autónomos
Cuenta atrás para los autónomos que quieran beneficiarse del bono social eléctrico. El Gobierno de Pedro Sánchez no ha extendido la consideración de los trabajadores por cuenta propia como ‘colectivos vulnerables’, por lo que, a partir del 28 de febrero, ya no podrán acceder al bono social eléctrico, que actualmente les suponía un descuento del 60% en la factura de la luz. Una ayuda de la que se beneficiaban muchos trabajadores que se veían asfixiados por el alza en sus recibos como consecuencia de los altos precios de la luz.
El bono social -una medida ya existente antes del estallido del Covid-19- se reforzó para atender a muchos trabajadores, familias y pensionistas con bajos ingresos. En 2020, con motivo de la crisis sanitaria, se amplió, llegando a más colectivos como personas en ERTE y también a los autónomos que presentasen una caída en su facturación de más del 75% en el mes anterior a la solicitud o hubiesen cesado por completo su actividad.
Una ampliación de los beneficiarios que finalizará el próximo 28 de febrero, por lo que todos aquellos consumidores considerados vulnerables por la caída en la actividad derivada de la pandemia tienen tan sólo 12 días para solicitar esta prestación. El bono social, contemplaba un descuento del de un 25% o de un 40% para consumidores vulnerables o vulnerables severos. Sin embargo, los récords registrados durante los meses de verano del pasado año dejaron sin efecto esta prestación: hasta el mes de agosto la factura fue de 546,25 euros, frente a los 437,85 euros que representaron el pasado año hasta el mes de agosto. Se trataba así de un sobrecoste de 108,4 euros, lo que supone un 24,8% más, comiéndose esa rebaja del 25% de la que se beneficiaban cerca de 582.851 consumidores.
Ante la espiral alcista que estaba experimentando el pool el Gobierno de Pedro Sánchez se vio obligado a elevar la rebaja -hasta el 30 de abril de 2022- al 60% para los consumidores vulnerables y del 70% para los consumidores vulnerables severos. Para que un trabajador por cuenta propia puede beneficiarse de esta ayuda tiene que cumplir uno de los dos supuestos: o se han dado de baja del RETA o han reducido un 75% su facturación en el mes anterior al que se solicita el bono social.
Para beneficiarse del bono social, el autónomo deberá remitir a su comercializador de referencia, a través de la dirección de correo electrónico que aparezca en su página web, el modelo de solicitud aprobado el pasado 3 de abril, junto con una copia del NIF o NIE del titular del punto de suministro, el certificado de empadronamiento en vigor, el libro de familia y la acreditación de su condición de trabajadores autónomos que hayan visto afectada su actividad como consecuencia del Covid-19.