Las horas extra gratis se disparan pese al registro horario
La pandemia y el teletrabajo han provocado que una de cada dos no se pague. El control de jornada cumple dos años.
El registro horario de la jornada de trabajo cumple esta semana dos años de vida con muchas asignaturas pendientes, ya que no ha conseguido resolver dos de sus principales objetivos: acabar con las horas extra impagadas y controlar el absentismo. La dificultad de las pymes para su aplicación completa, la pandemia y el teletrabajo han complicado unos buenos resultados.
Este registro obligatorio, aprobado el 12 de mayo de 2019, dejaba la potestad a las empresas para negociar las condiciones con los representantes de sus trabajadores, lo que ha hecho prácticamente imposible que se pudiera llevar a cabo en las de menor tamaño, con ausencia de presencia sindical por el reducido número de trabajadores. Por ello, mientras que en las grandes compañías el registro ha logrado sus objetivos, en el 95% de la empresas españolas las dificultades para comprobar y registrar las horas extra se ha hecho patente, pese a la obligatoriedad del registro.
Más de 745.600 trabajadores realizan un total de 5,6 millones de horas extra a la semana, de las que más de 2,5 millones (efectuadas por más de 337.200 empleados) no fueron cobradas ni cotizadas, según los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA) relativos al primer trimestre del año. En su informe se determina que los confinamientos, las restricciones y el teletrabajo han provocado que el número total de horas extra haya disminuido un 15%, una caída que también se ha visto reflejada en las no remuneradas, que suman un 3% más, hasta el 18%.
Sin embargo, esta situación muestra una paradoja: aunque también ha disminuido el número de trabajadores que realizan horas extra, ha aumentado el que las hace gratis. Así, si en el año 2020 uno de cada tres empleados que hacía horas extra no las cobraba, en lo que va de año son ya uno de cada dos.
El sector que aglutina la mayor cuantía de trabajadores con horas extra impagadas es la educación. Fueron 55.200 trabajadores los que efectuaron 464.700 horas semanales gratis, seguidos por el comercio, con 39.500 trabajadores, que hicieron 389.300 horas extra sin cobrar. En cuanto al teletrabajo, durante el pico del confinamiento se llegó a superar la cifra de tres millones de teletrabajadores, que aunque se disponía de tecnología para su control, la situación tardó en normalizarse.